Antes que nada queremos saludarlos muy afectuosamente y deseamos que toda la Bendición de Dios ilumine vuestros corazones.
El motivo de esta carta es para decirles que estamos eternamente agradecidos por la ayuda que hace años nos vienen brindando.
Queremos contarles que C., nuestro hijo mayor ya terminó sus estudios en los cuales su ayuda fue muy importante. Mientras que, K. de 14 años, mi otra hija, le ha ido muy bien en sus estudios gracias a una beca que se ganó... Y los dos pequeños, I. y F., están asistiendo al jardín infantil.
Además queremos agradecer toda la preocupación que han tenido en relación a la enfermedad de S. mi señora que gracias a Dios ha evolucionado favorablemente y vuestra ayuda nos ha servido de manera muy importante y por eso muchas gracias.
También queremos contarles que estábamos un poco tristes en relación al tema de la casa donde vivimos, ya que ésta pasó a ser del estado, por lo tanto, ahora ellos tienen que vender, y nosotros deberíamos irnos, pero una vez más llegó vuestra ayuda y gracias al dinero que nos enviaron pudimos abrir una cuenta de ahorro para la vivienda y así nuestras esperanzas de quedarnos con la casa han vuelto a cobrar vida aunque el estado vende estas casas a un valor muy alto. Nosotros estamos dispuestos a luchar por nuestra casa propia.
Les queremos contar que el dinero nos llegó el día del cumpleaños de mi señora e inmediatamente lo fuimos a depositar.
Toda mi familia está muy contenta y agradecida y para mi señora fue el mejor regalo de cumpleaños que pudiera haber recibido, si bien es cierto que falta mucho, vuestra ayuda ha sido fundamental para motivarnos a trabajar duro y esforzarnos por cumplir nuestros sueños.
Bueno, sin tener más que contarles por ahora nos despedimos de ustedes con mucho afecto y agradecemos eternamente su ayuda.
Nos despedimos, que Dios los bendiga y hasta siempre...
Familia E. A.
